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| Developer | Jacm Apps |
| Category | Apps, Social |
| Package Name | com.jacmapps.lanovenaalsantofrancisco |
| OS | 2.3 and up |
La novena al Santo Francisco APPLICATION description
La Porciúncula, en la Basílica de Nuestra Señora de los Ángeles
La Porciúncula es un pueblo y a la misma vez una iglesia localizada aproximadamente a tres-cuartos de milla de la ciudad de Asís en Italia. El pueblo ha progresado alrededor de la Basílica de Nuestra Señora de los Ángeles. Fue precisamente en esta Basílica que San Francisco de Asís recibió su vocación en el año 1208. San Francisco vivió la mayor parte de su vida en este lugar. En el año 1211, San Francisco logró una estadía permanente en este pueblo cerca de Asís, gracias a la generosidad de los Benedictinos, los cuales le donaron la pequeña capilla de Santa María de los Ángeles o la Porciúncula, considerada como “una pequeña parte” de esas tierras.
Un día mientras San Francisco estaba arrodillado en la capilla de San Damián, sintió que Cristo le habló desde el crucifijo y le dijo: “Reconstruye mi Iglesia que esta en ruinas.” El se tomó estas palabras literalmente y empezó a reconstruir varias Iglesias. No fue hasta un tiempo después que San Francisco comprendió que el mensaje principal de Cristo era que construyera y fortaleciera espiritualmente la Iglesia de Cristo. Así fue que el Santo comenzó a trabajar en la restauración de las iglesias de San Damián, San Pedro Della Spina y Santa Maria de los Ángeles o de la Porciúncula.
Al lado del humilde santuario de la Porciúncula, fue edificado el primer convento Franciscano, con la construcción de unas cuantas pequeñas chozas o celdas de paja y barro, cercadas con un seto. Este acuerdo fue el comienzo de la Orden Franciscana. La Porciúncula fue también el lugar donde San Francisco recibió los votos de Santa Clara. El 3 de Octubre de 1226, muere San Francisco, y en su lecho de muerte, le confía el cuidado y protección de la capilla a sus hermanos.
Un poco después del año 1290, la capilla, la cual media aproximadamente 22 pies por 13 ½ pies fue ampliamente engrandecida para poder acomodar a la cantidad de peregrinos que venían a visitarla. Más tarde, los edificios alrededor del santuario fueron destruidos por orden de Pio V (1566-72), excepto la celda en la cual murió San Francisco. Luego, estos fueron reemplazados por una gran Basílica, estilo contemporáneo. El nuevo edificio fue erigido sobre su celda y sobre la capilla de la Porciúncula. La Basílica ahora tiene tres naves y un circulo de capillas que se extienden a lo largo de la longitud de los costados.
La Basílica forma una cruz latina de 416 pies de largo por 210 pies de ancho. Un pedazo del altar de la capilla es de la Anunciación, la cual fue pintada por un sacerdote en el año 1393. Uno todavía puede visitar la celda donde murió San Francisco. Detrás de la sacristía se encuentra el sitio donde el santo, durante una tentación se dice, que se revolcó en un arbusto de brezo, el cual después se convirtió en un rosal sin espinas. Fue precisamente durante esa misma noche del 2 de Agosto, que el Santo recibió la “Indulgencia de la Porciúncula.” Hay una representación del recibimiento de esta indulgencia en la fachada de la capilla de la Porciúncula.
Todos los fieles católicos pueden alcanzar la indulgencia plenaria el 2 de Agosto (o en otro día que haya sido declarado o asignado por el ordinario local para el beneficio de los fieles), bajo las debidas disposiciones (confesión sacramental, santa comunión, y rezar por las intenciones del Santo Padre). Estas condiciones pueden cumplirse unos días antes o después del día en que se gana la indulgencia. También tienen que visitar la iglesia devotamente y rezar el Padrenuestro y el Credo. La Indulgencia se aplica a la Catedral de la Diócesis, y a la co-catedral (si es que existe alguna), aunque no sean parroquiales, y también las iglesias quasi-parroquiales. Para alcanzar esta indulgencia, como cualquier indulgencia plenaria, los fieles tienen que estar libres de cualquier apego al pecado, aún al pecado venial. Donde se desea este apego, la indulgencia es parcial. Portiuncula, in the Basilica of Our Lady of the Angels
The Porziuncola is a village and at the same time a church located approximately three-quarters of a mile from the town of Assisi in Italy. The village has progressed around the Basilica of Our Lady of the Angels. It was in this Basilica St. Francisco de Asís received his vocation in the year 1208. San Francisco lived most of his life in this place. In 1211, San Francisco achieved a permanent stay in this town near Assisi, through the generosity of the Benedictines, which he donated the small chapel of St. Mary of the Angels or the Porziuncola, considered "a small portion" of these lands.
One day while San Francisco was kneeling in the chapel of San Damiano, felt that Christ spoke to him from the crucifix and said: "Rebuild my Church in ruins." He took these words literally and began rebuilding several churches. It was not until some time after San Francisco realized that the main message of Christ was spiritually to build and strengthen the Church of Christ. So it was that the Holy began work on the restoration of the church of San Damiano, San Pedro and Santa Maria Della Spina Angels or the Porziuncola.
Beside the humble sanctuary of Portiuncula, it was built the first Franciscan convent with the construction of a few small huts or cells of wattle and daub, fenced with a hedge. This agreement was the beginning of the Franciscan Order. Portiuncula was also the place where St. Francis received the votes of Santa Clara. On October 3, 1226, San Francisco dies, and on his deathbed, entrusted with the care and protection of the chapel to his brothers.
Shortly after the year 1290, the chapel, which average about 22 feet by 13 ½ feet was widely enlarged to accommodate the number of pilgrims who came to visit. Later, the buildings around the shrine were destroyed by order of Pius V (1566-1572), except the cell in which San Francisco died. Of course, these were replaced by a large basilica, contemporary style. The new building was erected on his cell and the chapel of the Portiuncula. Basilica now has three aisles and a circle of hoods extending along the length of the sides.
The Basilica is a Latin cross 416 feet long by 210 feet wide. A piece of the altar of the chapel of the Annunciation, which was painted by a priest in 1393. One can still visit the cell where he died San Francisco. Behind the sacristy is the place where the saint, during a temptation is said that wallowed in a bush heather, which later became a rose without thorns. It was during that night of August 2, the Holy received the "Indulgence of the Portiuncula." There is a representation of receipt of this indulgence on the facade of the chapel of the Portiuncula.
All Catholic faithful can obtain a plenary indulgence on August 2 (or another day has been declared or assigned by the local ordinary for the benefit of the faithful), under the proper dispositions (sacramental confession, Holy Communion, and pray for the intentions of the Holy Father). These conditions can be met a few days before or after the day when the indulgence is gained. They also have to visit the church and devoutly pray the Our Father and the Creed. Mildness is applied to the Cathedral Diocese, and the co-cathedral (if any), although not Parish, churches and quasi-Parish. To achieve this indulgence, like any plenary indulgence, the faithful must be free of any attachment to sin, even venial sin. Where this attachment is desired, the indulgence is partial.
La Porciúncula es un pueblo y a la misma vez una iglesia localizada aproximadamente a tres-cuartos de milla de la ciudad de Asís en Italia. El pueblo ha progresado alrededor de la Basílica de Nuestra Señora de los Ángeles. Fue precisamente en esta Basílica que San Francisco de Asís recibió su vocación en el año 1208. San Francisco vivió la mayor parte de su vida en este lugar. En el año 1211, San Francisco logró una estadía permanente en este pueblo cerca de Asís, gracias a la generosidad de los Benedictinos, los cuales le donaron la pequeña capilla de Santa María de los Ángeles o la Porciúncula, considerada como “una pequeña parte” de esas tierras.
Un día mientras San Francisco estaba arrodillado en la capilla de San Damián, sintió que Cristo le habló desde el crucifijo y le dijo: “Reconstruye mi Iglesia que esta en ruinas.” El se tomó estas palabras literalmente y empezó a reconstruir varias Iglesias. No fue hasta un tiempo después que San Francisco comprendió que el mensaje principal de Cristo era que construyera y fortaleciera espiritualmente la Iglesia de Cristo. Así fue que el Santo comenzó a trabajar en la restauración de las iglesias de San Damián, San Pedro Della Spina y Santa Maria de los Ángeles o de la Porciúncula.
Al lado del humilde santuario de la Porciúncula, fue edificado el primer convento Franciscano, con la construcción de unas cuantas pequeñas chozas o celdas de paja y barro, cercadas con un seto. Este acuerdo fue el comienzo de la Orden Franciscana. La Porciúncula fue también el lugar donde San Francisco recibió los votos de Santa Clara. El 3 de Octubre de 1226, muere San Francisco, y en su lecho de muerte, le confía el cuidado y protección de la capilla a sus hermanos.
Un poco después del año 1290, la capilla, la cual media aproximadamente 22 pies por 13 ½ pies fue ampliamente engrandecida para poder acomodar a la cantidad de peregrinos que venían a visitarla. Más tarde, los edificios alrededor del santuario fueron destruidos por orden de Pio V (1566-72), excepto la celda en la cual murió San Francisco. Luego, estos fueron reemplazados por una gran Basílica, estilo contemporáneo. El nuevo edificio fue erigido sobre su celda y sobre la capilla de la Porciúncula. La Basílica ahora tiene tres naves y un circulo de capillas que se extienden a lo largo de la longitud de los costados.
La Basílica forma una cruz latina de 416 pies de largo por 210 pies de ancho. Un pedazo del altar de la capilla es de la Anunciación, la cual fue pintada por un sacerdote en el año 1393. Uno todavía puede visitar la celda donde murió San Francisco. Detrás de la sacristía se encuentra el sitio donde el santo, durante una tentación se dice, que se revolcó en un arbusto de brezo, el cual después se convirtió en un rosal sin espinas. Fue precisamente durante esa misma noche del 2 de Agosto, que el Santo recibió la “Indulgencia de la Porciúncula.” Hay una representación del recibimiento de esta indulgencia en la fachada de la capilla de la Porciúncula.
Todos los fieles católicos pueden alcanzar la indulgencia plenaria el 2 de Agosto (o en otro día que haya sido declarado o asignado por el ordinario local para el beneficio de los fieles), bajo las debidas disposiciones (confesión sacramental, santa comunión, y rezar por las intenciones del Santo Padre). Estas condiciones pueden cumplirse unos días antes o después del día en que se gana la indulgencia. También tienen que visitar la iglesia devotamente y rezar el Padrenuestro y el Credo. La Indulgencia se aplica a la Catedral de la Diócesis, y a la co-catedral (si es que existe alguna), aunque no sean parroquiales, y también las iglesias quasi-parroquiales. Para alcanzar esta indulgencia, como cualquier indulgencia plenaria, los fieles tienen que estar libres de cualquier apego al pecado, aún al pecado venial. Donde se desea este apego, la indulgencia es parcial. Portiuncula, in the Basilica of Our Lady of the Angels
The Porziuncola is a village and at the same time a church located approximately three-quarters of a mile from the town of Assisi in Italy. The village has progressed around the Basilica of Our Lady of the Angels. It was in this Basilica St. Francisco de Asís received his vocation in the year 1208. San Francisco lived most of his life in this place. In 1211, San Francisco achieved a permanent stay in this town near Assisi, through the generosity of the Benedictines, which he donated the small chapel of St. Mary of the Angels or the Porziuncola, considered "a small portion" of these lands.
One day while San Francisco was kneeling in the chapel of San Damiano, felt that Christ spoke to him from the crucifix and said: "Rebuild my Church in ruins." He took these words literally and began rebuilding several churches. It was not until some time after San Francisco realized that the main message of Christ was spiritually to build and strengthen the Church of Christ. So it was that the Holy began work on the restoration of the church of San Damiano, San Pedro and Santa Maria Della Spina Angels or the Porziuncola.
Beside the humble sanctuary of Portiuncula, it was built the first Franciscan convent with the construction of a few small huts or cells of wattle and daub, fenced with a hedge. This agreement was the beginning of the Franciscan Order. Portiuncula was also the place where St. Francis received the votes of Santa Clara. On October 3, 1226, San Francisco dies, and on his deathbed, entrusted with the care and protection of the chapel to his brothers.
Shortly after the year 1290, the chapel, which average about 22 feet by 13 ½ feet was widely enlarged to accommodate the number of pilgrims who came to visit. Later, the buildings around the shrine were destroyed by order of Pius V (1566-1572), except the cell in which San Francisco died. Of course, these were replaced by a large basilica, contemporary style. The new building was erected on his cell and the chapel of the Portiuncula. Basilica now has three aisles and a circle of hoods extending along the length of the sides.
The Basilica is a Latin cross 416 feet long by 210 feet wide. A piece of the altar of the chapel of the Annunciation, which was painted by a priest in 1393. One can still visit the cell where he died San Francisco. Behind the sacristy is the place where the saint, during a temptation is said that wallowed in a bush heather, which later became a rose without thorns. It was during that night of August 2, the Holy received the "Indulgence of the Portiuncula." There is a representation of receipt of this indulgence on the facade of the chapel of the Portiuncula.
All Catholic faithful can obtain a plenary indulgence on August 2 (or another day has been declared or assigned by the local ordinary for the benefit of the faithful), under the proper dispositions (sacramental confession, Holy Communion, and pray for the intentions of the Holy Father). These conditions can be met a few days before or after the day when the indulgence is gained. They also have to visit the church and devoutly pray the Our Father and the Creed. Mildness is applied to the Cathedral Diocese, and the co-cathedral (if any), although not Parish, churches and quasi-Parish. To achieve this indulgence, like any plenary indulgence, the faithful must be free of any attachment to sin, even venial sin. Where this attachment is desired, the indulgence is partial.
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